lunes, 31 de diciembre de 2018

Documental de propaganda chileno sobre la Crisis del Beagle

El documental más completo sobre la Guerra del Beagle






Serie "1978, la Guerra del Beagle", es uno de los trabajos audiovisuales más completos sobre el conflicto armado con Argentina.

Producida por el ingeniero y Oficial de la Compañía de la Reserva Naval Yates, Rodrigo Álamos, dirigida por Eduardo Tironi, y con la participación de la historiadora Patricia Arancibi., el documental 1978, la Guerra del Beagle, es uno de los trabajos audiovisuales más completos sobre el conflicto armado con Argentina.

El documental incluye el testimonio de 42 protagonistas de la época, algunos de ellos fallecidos, que pretenden desentrañar las razones por las cuales este conflicto no se transformó en una guerra, pese a que las órdenes de iniciar el ataque fueron dadas por ambos países la noche del 21 de diciembre de 1978.

La Tercera

martes, 11 de diciembre de 2018

'Wehrhafte Schweiz', propaganda militar suiza al nivel de arte


Esta película de propaganda del ejército suizo de 1964 obtuvo una nominación al Oscar

'Wehrhafte Schweiz' es una obra maestra militar
Matthew Moss | War is Boring


El cortometraje Wehrhafte Schweiz del director holandés John Fernhout, que es la Suiza fortificada en español, es una magnífica representación de las fuerzas armadas suizas en acción a principios de los años sesenta.

Filmada a un costo de entre uno y tres millones de francos suizos, la película de 20 minutos de duración presenta las armas combinadas del ejército suizo durante una invasión ficticia. El hombre de las tropas se posiciona en los Alpes, en los cruces de ríos y en las colinas.




La película muestra una gran cantidad de aviones y vehículos blindados en acción, y también presenta en gran medida la ametralladora MG52 y el rifle de batalla SIG StG-57.

Fernhout hizo su película con la ayuda del ejército suizo. Es propaganda. Pero eso no impidió que la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas la nominara a un Oscar al mejor cortometraje en 1965.

Wehrhafte Schweiz fue bien recibido en Suiza. Una versión en inglés, Fortress of Peace, jugada en todo el mundo. La película fue restaurada en 2014.

miércoles, 21 de noviembre de 2018

SGM: Un puente demasiado lejos (1977)

Un puente demasiado lejos (1977)


Esta epopeya estelar de la Segunda Guerra Mundial representa la derrota aliada en Arnhem, Holanda, en septiembre de 1944 y se concentra en los asignados para capturar el puente de importancia estratégica, a pesar de las probabilidades insuperables ... Se planificó lanzar 35,000 paracaidistas estadounidenses y británicos al este de Holanda para aseguró seis puentes que conducen a la frontera alemana, mientras que una fuerza de tierra británica aceleró a través de Bélgica hasta el puente de Arnhem en el río Rin.

martes, 13 de noviembre de 2018

Invasión (1969)

 Invasión


Escrita por Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares y Hugo Santiago Muchnick. Dirigida y Producida por Hugo Santiago Muchnick. Película de culto. Punto.




sábado, 27 de octubre de 2018

Attention, hélicoptère ! (1963)

"¡Atención! ... Helicópteros" (Francia)
de Pierre Schoendoerffer  (1963)

Una joya del cine militar, por favor, disfruten de los 20 minutos excelentemente filmados en territorio alemán ocupado por fuerzas francesas. Definitivamente, una joyita.

Cortometraje dirigido por Pierre Schoendoeffer (1928-2012) para el Departamento de Cine del Ejército (SCA alias ECPAD).



"Mañana, los herederos de la gran caballería - coraceros de la Reina, dragones de Condé, húsares de Lasalle, spahis de Youssouff - por la elasticidad del ala rotatoria, se infiltrarán a través de cualquier terreno de maniobra y de carga."
Pierre Schoendoerffer, "¡Atención! .. Helicópteros" (1963)

La película fue lanzada durante la Guerra Fría, pocos meses después de la guerra de Argelia - un año antes de la guerra de Vietnam - y 16 años antes del primer día del Apocalipsis Now de Cannes de Francis Ford Coppola y sus superposiciones de míticas valquirias. En lugar de Wagner, Peter Schoendoerffer prefería el cuarto movimiento Stürmisch Bewegt de la Sinfonía nº 5 de Mahler. ¡Atención! .. Helicóptero muestra el papel de los helicópteros, especialmente SA3160 Alouette III (1959) y SE3130 Alouette II (1955), a la luz de Aviación del Ejército (ALT).

En 1963, el helicóptero militar se encuentra todavía en su infancia, a pesar de que estuvo en funcionamiento durante la guerra de Indochina y de Argelia, por ejemplo, durante la operación "Jumelles" en Cabilia en 1959 y 1960. Había equipo estadounidense en servicio en el ejército francés desde la década de 1950 - Piasecki H-21, Sikorsky H-19, Sikorsky H-34 - estaba siendo sustituido por helicópteros de fabricación nacional o licencia de Sud-Aviation.

En combate, el helicóptero Alouette II / III estaban armado con lanzadores de cohetes (Matra LR361) y anti-tanque misiles aire-suelo (Nord-Aviation AS11) desarrollados durante la guerra de Argelia. El Coronel de la Fuerza Aérea y politécnico Jean Bastien-Thiry supervisó el diseño de la versión, la construcción y producción en masa del Sol-Sol 11 (SS11 dispositivo) que se derivaba directamente de la AS11. Este cohete es el primer misil antitanque para helicóptero RC SS11/AS11 en el mundo y se ha utilizado - entre otros - por el Ejército de los EE.UU. bajo la denominación AGM-22.

Tenga en cuenta, además de la presencia en la película de varios helicópteros ya mencionados, la aparición en la apertura de AMX-13 VTT, el crucero Colbert C611 de la Armada, un caza Dassault Mirage III, un Panhard EBR (Engin Armored Reconosaince) y la participación del cuarto RTM (Regimiento de Tiradores de Marruecos) antes de su disolución al año siguiente, Marruecos ha dejado de ser un protectorado francés en 1956 (junto con Túnez).

El tiroteo tuvo lugar en la zona francesa de ocupación en el oeste de Alemania (Baden-Württemberg) con la ayuda de las fuerzas francesas en Alemania, probablemente los tanques de la Brigada Mecanizada 5. El Castillo de Hohenzollern (Burg Hohenzollern), que fue construido en las orillas del Mar del Norte desde 1850 hasta 1867 y cuenta con una arquitectura inspirada en los castillos neogóticos y francesa del Loire, está especialmente hecha honrar al final de la película, que no debe confundirse con el famoso castillo de Hohenzollern-Sigmaringen (Schloss Sigmaringen) que aloja el mariscal Pétain y la Delegación del Gobierno francés desde 1944 hasta 1945!

El título de la película "¡Atención ! .. Helicóptero" proviene del famoso libro "Achtung - Panzer!" (Advertencia: Blindados!) que el general alemán Heinz Guderian publicó en 1937. Esta prueba de la estrategia militar exige el desarrollo de las unidades blindadas y expone sus tácticas y su potencial operativo y en Francia, el general Estienne - cuyas teorías fueron llevados a consideración por el general De Gaulle en 1932 y 1934 pionero en este campo desde 1920. La influencia de Achtung - Panzer! fue decisiva en la estrategia alemana (Blitzkrieg) durante la Segunda Guerra Mundial.

Theatrum Belli

miércoles, 17 de octubre de 2018

La PGM en el cine

Trávelin de trinchera

La I Guerra Mundial ha dado muchas menos películas que la segunda, pero más obras maestras


Jacinto Antón | El País


 
Fotograma de "El Barón Rojo" (1971), de Roger Corman


Aeroplanos, cargas de caballería, trincheras, ametralladoras… ¿Cuál es la primera imagen cinematográfica que viene a la cabeza al pensar en las películas sobre la I Guerra Mundial? Hagan la prueba. ¿El lento planear, balanceándose, del triplano de Manfred von Richthofen, con el as herido de muerte a los mandos, en el emocionante filme de Roger Corman de 1971 El Barón Rojo? ¿Los coraceros franceses dando vueltas alegremente en un tiovivo —hasta que la escena se disuelve en una masacre, con los jinetes cayendo del carrusel— del sarcástico musical de 1969 de Richard Attenborough Oh, what a lovely war? ¿La carrera desesperada de Frank Dunne (Mel Gibson) por parar un ataque y salvar a su amigo en Gallipoli, de Peter Weir (1981)? ¿La cabalgada enloquecida entre las alambradas de la tierra de nadie del sufrido caballo Joey de War Horse,de Spielberg (2011)?

Todos esos son grandes momentos, pero la mayoría se inclinará por el famoso, intenso, tremendo trávelin de las trincheras de Senderos de gloria (1957), de Stanley Kubrick, sin duda el momento emblemático y culminante del cine sobre la Gran Guerra, con el coronel francés Dax (Kirk Douglas) avanzando entre sus soldados expectantes preparados para la ofensiva. Esos dos larguísimos minutos, pura historia del cine, insoportables en su tensión, nos arrastran a la esencia de la guerra y la experiencia directa del combate (Ridley Scott homenajeó la escena en Gladiator, con el general Máximo caminando en el pasillo que le abren sus cohortes antes de la batalla en Germania). Dax marcha entre sus hombres por la larga trinchera a la vez resuelto y cariacontecido; los soldados con las bayonetas caladas se apartan esperando sus órdenes. Alrededor caen las bombas, se levantan surtidores de tierra y nubes de humo: se desata un verdadero pandemonio, estrepitosa antesala del infierno. Dax llega hasta un punto en la trinchera, consulta su reloj, saca la pistola, se lleva el silbato a la boca, sube por una escalera de mano, silba —aquí tragamos todos saliva a espuertas— y sale del parapeto: el regimiento va tras él para ser devastado por las ametralladoras y los obuses (y la criminal estulticia de sus generales).


Fotograma de "Senderos de gloria", el filme de 1957 dirigido por Stanley Kubrick y protagonizado por Kirk Douglas



Con Dax y Senderos de gloria —película valiente (vetada en Francia hasta 1975), que refleja sobrecogedoramente la guerra y a la vez la presenta en toda su maldita sinrazón— en vanguardia, la filmografía de la I Guerra Mundial está llena de imágenes y escenas que nos han conmovido hasta lo indecible: el soldado alemán Paul al que le vuela la cabeza un francotirador francés cuando trata de tocar una mariposa fuera de la trinchera al final de Sin novedad en el frente (1930); el momento en que Von Stroheim corta su única flor —un geranio; la justicia poética pedía una amapola— tras la muerte de su estimado prisionero Jean Gabin en La gran ilusión.


Paradójicamente, una primera reflexión es que hay relativamente pocas producciones dedicadas a esa guerra, sobre todo si comparamos con la infinidad que se han hecho sobre la II Guerra Mundial. Los motivos de la absoluta preponderancia de la segunda son varios: evidentemente, está más cerca, somos sus herederos y de alguna manera resultó una continuación conclusiva de la anterior. Fue una guerra mucho más catastrófica, con más del doble de muertos, una incidencia mucho mayor sobre la población civil, los bombardeos sistemáticos de ciudades y, claro, las dos bombas atómicas. La segunda tiene una dimensión moral mayor: hay buenos y malos más claros que en la primera (qué mal malo, y valga el pleonasmo, es el káiser comparado con Hitler: ¡si parece salido de El prisionero de Zenda!). Y sobre todo, la segunda contiene el Holocausto. Añadamos que la segunda, en su movilidad (de la que es paradigma la Blitzkrieg, la guerra relámpago), resulta más cinematográfica que la primera, enfangada en las trincheras, con grandes periodos de inactividad.

De la guerra aérea destacan ‘El Barón Rojo’, ‘Las águilas azules’ y ‘Alas’, cuyo director fue piloto de la Escuadrilla Lafayette

La I Guerra Mundial resulta más incómoda ideológicamente: fue una carnicería absurda, no una guerra buena como la segunda. Si nos fijamos bien, y en ello han puesto el énfasis gran parte de las mejores películas de la contienda, los verdaderos infames de la primera son los políticos y los mandos militares propios, que se dejan arrastrar los primeros a la guerra y la libran los segundos —los Haig, Joffre, Conrad, Moltke— con un absoluto desprecio por las vidas de sus soldados. Ellos son los auténticos enemigos de los combatientes, capaces de malgastarlos a millares en una ofensiva estúpida o de ejecutarlos por no llevar la vestimenta reglamentaria (El pantalón, de Yves Boisset). La mirada positiva del sacrificio de Salvar al soldado Ryan no encuentra equivalente en la Gran Guerra: aquí no se salva nadie y toda muerte —a menudo ante un pelotón de fusilamiento, “blindfold and alone”— es inútil. Frente al optimismo de los filmes de la segunda, en los de la primera dominan el fatalismo y un desolador pesimismo. Eso tampoco hace un cine muy popular.


Fotograma de la serie "Black Adder Goes Forth", con el actor Rowan Atkinson en el papel de un capitán de la IGM



Una mirada más atenta revela no solo que no son tan escasas las películas de la I Guerra (aunque las hay muy poco conocidas, como el biopic del poeta Siegfreid Sasoon Regeneration —¡hasta he localizado una en la que Klaus Kinski encarna a uno de los terroristas del atentado de Sarajevo, Cabrinovic!—), sino que además figuran entre ellas un buen número de auténticas obras maestras, incluso más de las que ha alumbrado su sucesora. Citemos de entrada, junto a Senderos de gloria, la tan poética, tristísima y antibelicista (Goebbels la aborrecía) La gran ilusión, de Jean Renoir (con esos dos militares de casta, el francés prisionero Boieldieu y el alemán Von Rauffenstein, tendiendo puentes humanos por encima de la guerra); Rey y patria, de Joseph Losey, con su pobre zapatero desertor; Sin novedad en el frente, de Lewis Milestone, o Cuatro de infantería, de Georg W. Pabst, por nombrar cuatro joyas, una francesa, una británica, una estadounidense y una alemana, respectivamente. Ahí están también El gran desfile, de King Vidor, o De Mayerling a Sarajevo, de Max Ophuls. Otra película magistral que la gente no asocia de entrada con la Gran Guerra, pese a ser claramente ese su tema, es Lawrence de Arabia, de David Lean. Hay más: la extraordinaria Capitán Conan, de Tavernier —con esos soldados que no entienden por qué no pueden seguir matando después de la guerra (y la brutal escena de la lucha contra el Ejército Rojo cruzando el Danubio)—; y qué decir de la inolvidable irrupción de Charlot en la guerra de trincheras, ¡Armas al hombro! (Chaplin, 1918).

También abordan la I Guerra Mundial filmes tan recordados (aunque no por eso) como La reina de África, de John Huston (1951); Doctor Zhivago y Memorias de África, con la colonia de Kenia movilizada para luchar contra las fuerzas de la Tanganica germana y Karen Blixen (Meryl Streep) primero marginada por su condición de danesa y luego vitoreada por llevar vituallas para las tropas británicas entre las que combate como scout –como en realidad hizo- su amado Denis Finch-Hatton (Redford). Otro filme con I Guerra Mundial, este menor, y que me perdonen los fans de Brad Pitt y su peluquero (acaso el otro Sasoon, Vidal), es Leyendas de pasión, con Tristan Ludlow (Pitt) haciendo literalmente el indio en las trincheras de Francia.

Hay que recordar que existen alrededor de diez veces más películas sobre la Segunda Guerra Mundial que dedicadas a la Primera (a ojo de buen cubero, más de un millar frente a menos de dos centenares). ¿Cuáles consideraríamos de verdad magistrales de la Segunda? De aquí a la eternidad, Salvar al soldado Ryan, El arpa birmana, La delgada línea roja, El puente sobre el río Kwai, Amarga victoria… No salen tantas realmente grandes, por mucho que tengamos debilidad por Los cañones de Navarone, La gran evasión, El desafío de las águilas, La cruz de hierro, o Los héroes de Telemark. Comparativamente igual de populares tenemos una buena cantidad de títulos de la Primera Guerra Mundial, más acá de las obras maestras: El sargento York (sobre el tan certero como íntegro héroe, interpretado por Gary Cooper), Johnny cogió su fusil, Adiós a las armas, Coronel Redl, Las águilas azules, las varias Mata-Hari (una con Sylvia Kristel), La trinchera –sobre un batallón británico en el Somme, con Daniel Craig-…


Fotograma de "la gran ilusión" de Jean Renoir


Temáticamente, el cine nos ha llevado a todos los escenarios y ámbitos de la I Guerra Mundial. La guerra de las trincheras en Francia y Flandes es lo que ha cosechado más películas, y la mayoría de las más famosas (añadamos a las mencionadas Tierra de nadie, con cinco soldados de diferentes ejércitos atrapados en medio de las líneas, y una gran escena de ataque con gas), pero también las han tenido el frente oriental, el frente italiano y la guerra con los austriacos, el frente turco (Jinetes de leyenda, sobre la caballería australiana en Palestina), la guerra en África, el espionaje (Coronel Redl, Mata Hari), los mutilados (El pabellón de los oficiales, Johnny cogió su fusil), el trauma de guerra (el impresionante mediometraje Coward, 2012, la confraternización (Feliz Navidad)…

La guerra aérea, que prácticamente nació entonces, ha originado todo un espléndido subgénero, centrado con frecuencia en el último atisbo de la caballerosidad bélica. Los mencionados filmes El Barón Rojo, con John Phillip Law poniendo un rostro noble y atormentado a Von Richthofen, y Las águilas azules, de John Guillermin, con George Peppard como as que consigue la preciada medalla Blue Max y de retruque a la aún más preciada esposa de su general (¡Ursula Andress!). Ambas películas ofrecen emocionantísimas secuencias de combates en el cielo; (imposible olvidar a Law en el ominoso gesto de armar sus ametralladoras). Aunque seguramente la gran obra (y otra de las creaciones maestras del cine de la contienda) es Alas, de William A. Wellman (1927), que sabía lo que se hacía, no en balde había sido él mismo piloto en la I Guerra Mundial. Incorporado a la Escuadrilla Lafayette, consiguió tres derribos seguros y cinco probables a los mandos de su Nieuport antes de ser derribado y quedar cojo. Alas, con un esfuerzo de producción alucinante para recrear las condiciones del frente (se emplearon 20 cámaras y hasta 60 aviones, todas las secuencias de vuelo son reales), narra un triángulo amoroso con dos aviadores enamorados de la misma mujer. Pese a su intensidad (esa escena de un amigo muriendo en manos del otro que lo ha abatido por equivocación, en una casa en la que se ha empotrado un Fokker), no esperen oír el rugido de los motores y los disparos: es muda.


La guerra aérea que prácticamente nació entonces, ha originado todo un espléndido subgénero

Mención aparte merece Zeppelin (1971), en la que Michael York trataba de obtener los planos del dirigible alemán. Mención aparte también merece la presencia de Elke Sommer.

Dos películas más recientes que a mí me han gustado mucho por recrear muy bien la guerra en el aire con aquellos aeroplanos son Flyboys —tremenda la imagen en la que los jovencitos aviadores del título atacan un dirigible, precisamente, por cuya superficie incendiada corre, mientras se va quedando sin nada bajo los pies, un sufrido tripulante alemán— y el último biopic, alemán, del Barón Rojo (Müllerschön, 2008), con un Richthofen (Matthias Schweighöfer) casi un niño, pero de enorme presencia. Hay que disculpar al director, aparte de una verdadera borrachera de triplanos rojos, la escena inventada en la que el barón y su supuesta némesis, el capitán Roy Brown, se encuentran y departen en tierra de nadie.

Mucha menos suerte ha tenido la guerra en el mar; no hay una gran película. ¡Y mira que hubo grandes episodios y rutilantes aventuras! Desde la batalla de Jutlandia hasta las correrías del velero corsario Seeadler del capitán Von Luckner, sin olvidar a los ases de la guerra submarina. Pocas películas conocidas se pueden citar en este ámbito —Mar de fondo, de John Ford (1931), contaba la historia de un buque trampa que trata de cazar a un submarino—, aunque un repaso concienzudo de la filmografía —véase La primera guerra mundial en el cine, de Emilio G. Romero (T&B, 2013)— revela la existencia de viejos filmes alemanes como Crucero Endem y U-9 Weddigen, ambos de los años veinte, sobre el legendario corsario y el famoso as de los sumergibles que en 1914 hundió tres cruceros británicos en una hora. En el ámbito también de las rarezas, Afrika mon amour, en la que aparece el héroe del África alemana comandante Paul von Lettow-Vorbeck y se reproduce la famosa batalla de Tanga, y Maciste alpino, con el forzudo del péplum convertido en soldado italiano en lucha contra los austriacos en los Dolomitas.

A recordar también la serie televisiva Black Adder goes Forth, en la que el personaje interpretado por Rowan Atkinson se convierte en un capitán de la I Guerra Mundial que trata por todos los medios de escapar con sus hombres de la masacre de las trincheras. La serie fue recientemente motivo de controversia porque el Gobierno conservador británico la puso como ejemplo de una visión “distorsionada” de la guerra que culpabilizaba a los oficiales del alto mando y los hacía aparecer como unos mastuerzos criminales. Con la historia y el cine en la mano, solo podemos estar de acuerdo con la versión de la serie.

En su libro, Romero recuerda que en la época el gesto de filmar, dándole a la manivela de la cámara, se parecía mucho al manejo de una ametralladora, y que los oficiales decían a los servidores del arma, "cinematografíame a esos tipos" para que dispararan contra los atacantes. Una imagen perturbadora que hace más impactantes aún las relaciones entre I Guerra Mundial y cine. Aeroplanos, cargas de caballería, trincheras, ametralladoras…

martes, 9 de octubre de 2018

11 errores notables en películas de guerra

11 errores ridículos hechos en las películas de guerra

Jeremy Lyons | War is Boring



PELÍCULA 'ENEMIGO EN LAS PUERTAS' POR JEAN-JACQUES ANNAUD (Foto de Siemoneit / Sygma a través de Getty Images)




Una de las bombas más grandes de la carrera de Ben Affleck, y ha habido varias, es una de las películas de guerra con más errores que Hollywood ha producido: Pearl Harbor (2001). No fue solo una mala película de Affleck, es una de las muchas películas que salen de la "fábrica de sueños" de Hollywood que no parece acertar al contar narraciones de la guerra.

Por supuesto, los cineastas tienen que mejorar las historias para atraer al público a los cines. Pero la precisión a menudo se sacrifica en el proceso. En Pearl Harbor, el personaje de Affleck es un miembro de la Fuerza Aérea que se une al Eagle Squadron.



En realidad, eso no podría suceder. Tampoco habría volado un avión polaco, como lo hace en la película. Esta película está plagada de tantos errores como balas, y las malas críticas siguieron rápidamente a su lanzamiento.


Fotografía de Battleship Row tomada desde un avión japonés al comienzo del ataque. La explosión en el centro es un golpe de torpedo en el USS West Virginia. Se pueden ver dos aviones japoneses atacantes: uno sobre el USS Neosho y otro sobre el Astillero Naval.

Hollywood a veces es presa de servir como propaganda, y no hay mejor ejemplo que la película de 1968 de John Wayne, The Green Berets. En verdad, la película estaba tratando de vender al público en una guerra impopular en Vietnam.



Casi todo sobre la película, desde el uso de bosques en lugar de una jungla, está mal. El desempeño de Wayne es increíble: está envejeciendo, tiene sobrepeso y está distraído, un hombre al que nunca se le permitiría ingresar al campo en el ejército real.



Incluso un ganador de Mejor Película como The Hurt Locker puede hacerlo mal. Los veteranos se quejaron de que esta representación de un escuadrón de bombardeos en Irak no se parecía a la realidad. En la película, los soldados no están supervisados ​​y son hoscos con los oficiales, ninguno de los cuales es justo o exacto, según el personal del ejército.


John Wayne (centro), de la película El día más largo

La Segunda Guerra Mundial es probablemente el terreno más fértil para los cineastas, pero eso también lo hace propicio para la reinvención creativa.



Windtalkers, una película de 2002 sobre el papel de los nativos americanos en la Segunda Guerra Mundial, los describe ayudando a las fuerzas de los Estados Unidos a enviarse mensajes codificados en Navajo. Pero también los muestra como desechables. A sus guardaespaldas se les dice que los maten en lugar de dejarlos caer en manos del enemigo. Esta película no pudo encontrar una audiencia, excepto quizás en Netflix.


Un Hablador de código navajo transmite un mensaje en una radio de campo. Los que hablaban en el código sirvieron en el Pacífico Sur durante la Segunda Guerra Mundial y se mantuvieron en secreto hasta 1968, cuando finalmente se desclasificó el código de Navajo.

Algunos errores son menos graves que otros. En 2006, Flyboys dramatizó la batalla entre los pilotos de EE. UU. Y el Luftstreitkräfte alemán.
Pero usaba los aviones equivocados. Los productores dijeron que era para que las audiencias pudieran distinguir una de la otra, lo que parecía bastante justo hasta que se reveló que un asesor militar de la película había inventado su registro de servicio.



Una película de 2000, U-571, recibió el reproche del miembro del más alto rango del gobierno británico en ese momento, el primer ministro Tony Blair. La película acreditó a Estados Unidos con la decodificación de la máquina del Enigma Nazi en 1941. Los Estados Unidos ni siquiera habían entrado en la guerra para ese entonces, y mucho menos habían descifrado el código.



Ese éxito fue alcanzado por la Royal Air Force, lo que provocó que el primer ministro británico llamara a la película "un insulto". El Juego de Imitación siguió unos años más tarde, una película muy aclamada que contaba la verdadera historia de la primera máquina Enigma y fue nominada varios oscars


Heinz Guderian con una máquina Enigma en un Sd.Kfz. 251 de media vía se utiliza como centro de comando móvil durante la batalla de Francia. Por Bundesarchiv, Bild CC-BY-SA 3.0.

Enemy At The Gates (2001) contó una historia de la Segunda Guerra Mundial desde un ángulo diferente, la de un francotirador soviético. La película está basada en el soldado real, Vasily Zaytsev, pero se cree que contiene dos errores críticos.

En primer lugar, muestra al Ejército Rojo gravemente mal equipado, lo cual no era cierto. En segundo lugar, muestra un encuentro individual entre el francotirador ruso y su oponente nazi, que los expertos creen que probablemente no sucedió.



The Battle Of The Bulge, lanzado en 1965, es una película muy admirada, pero también se equivocó bastante. Esta película épica muestra la famosa batalla que se libra en una tierra plana, pero la verdadera sucedió en un bosque. La batalla de la película se rodó en un clima "fácil", mientras que la real estaba plagada de nieve y lluvia. Finalmente, los tanques en el lado nazi eran claramente hechos en Estados Unidos.


Vasily Zaytsev, izquierda, y francotiradores soviéticos equipados con Mosin-Nagant M1891 / 30 con alcance PE en Stalingrado, diciembre de 1942.

Una película sobre la Segunda Guerra Mundial que trató de ser menos deprimente que la mayoría fue Red Tails, lanzada en 2002. Contó la historia del primer escuadrón aéreo afroamericano, pero en su deseo de ser positivo, cometió errores. En realidad, el escuadrón no tenía ases y, 25 bombarderos perdieron la vida ante las fuerzas enemigas. Sin embargo, la película no muestra esto, lo que implica que el equipo tuvo una tasa de supervivencia perfecta.




Pilotos de un escuadrón de caza de las Fuerzas Aéreas del Ejército de los EE. UU., acreditados por derribar 8 de los 28 aviones alemanes, 1944.

Presentar a las Fuerzas Armadas de manera negativa se ha convertido en un enfoque popular en estos días, como en Jarhead, lanzado en 2005. Esta película trata sobre la primera Guerra del Golfo y se desarrolla en los años noventa. Los funcionarios afirman que los severos métodos de entrenamiento que se muestran, durante los cuales muere un soldado, son injustos. Creen que la película hace que la vida del ejército parezca innecesariamente dura y argumentan que no se dejaría morir a los soldados en el campo de batalla. Los funcionarios declararon públicamente su descontento.



La guerra es un terreno fértil para que los cineastas puedan arar. No siempre lo hacen bien, de hecho, a menudo lo hacen mal. Pero siempre apuntan a esa cualidad esquiva, sin importar el género que minen: el entretenimiento que suena verdadero.

martes, 14 de agosto de 2018

Starship Troopers: Una estupenda fábula fascista


Starship Troopers: una de las películas más incomprendidas de la historia


La sátira autoconsciente de la película de ciencia ficción no fue reconocida por los críticos cuando apareció hace 16 años. Ahora, algunos finalmente están entendiendo la broma.
Calum Marsh | The Atlantic




Cuando los Starship Troopers de Paul Verhoeven llegaron a los cines hace 16 años, la mayoría de los críticos estadounidenses lo criticaron. En el New York Times, Janet Maslin interpretó el "espeluznante y enloquecido espectáculo" con "delicia hecho a medida para adolescentes". Jeff Vice, en el Deseret News, lo llamó "un fiesta de salpicones de sangre sin escalas, tan carente de sabor y "Roger Ebert, que elogió la" sátira social señalada "de Robocop de Verhoeven, encontró la película" unidimensional ", una nada trivial" lanzada a los 11 años de edad ". fanáticos de la ciencia ficción ".

Pero esos críticos no entendieron el punto. Starship Troopers es una sátira, un despliegue despiadadamente divertido y profundamente consciente del militarismo de derecha. El hecho de que fue y sigue siendo tomado al pie de la letra habla de la vaguedad que atraviesa la película.

Starship Troopers está ambientado en un futuro lejano, cuando la humanidad ha comenzado a colonizar mundos más allá de las fronteras de nuestra galaxia. La Tierra ha provocado una especie, por lo demás benigna, de alienígenas con apariencia de insecto para tomar represalias violentas contra nuestro planeta, que de repente y correctamente percibe como hostiles. Interpretando lo que obviamente son tácticas de autodefensa como nuevos gestos de agresión, la humanidad reúne a sus fuerzas y cargas globales en una guerra interestelar groseramente superada. La retórica en todo momento es inequívocamente fascista: los soldados de infantería desechables de la Tierra, entre los que naturalmente se ubica nuestro ex héroe deportista de escuela secundaria, están galvanizados por insípidos eslóganes, que regurgitan al mando con sinceridad mientras se dirigen al matadero. ("¡El único insecto bueno es un insecto muerto!" Es el canto más favorecido, abundan los matices de Animal Farm.)



La película resultante critica el complejo militar-industrial, el jingoísmo de la política exterior estadounidense y una cultura que privilegia la violencia reaccionaria sobre la sensibilidad y la razón. El guión, del escritor de Robocop Edward Neumeier, proporcionó el marco anticuado de ciencia ficción de la novela notoriamente militarista de Robert A. Heinlein con arquetipos en préstamo de jabones para adolescentes y ficción para adultos jóvenes, socavando el sablazo de sables de la fuente texto. Incluso la conclusión defiende cualquier sentimiento residual de heroísmo y valor: vemos a nuestros protagonistas, que escaparon de la muerte durante una misión casi suicida, marchando de regreso a la batalla en un video glorificado de reclutamiento, sugiriendo que en la guerra la única recompensa por una batalla bien combatida es la perspectiva de más batalla.



Durante las casi dos décadas desde el debut de la película, la reputación crítica de Starship Troopers no ha mejorado especialmente. Pero puede sentir que la conversación comienza a cambiar; con razón ha llegado a ser apreciado por algunos como una obra maestra no reconocida. Llegando al número 20 en la lista de la revista Slant de las 100 mejores películas de la década de 1990 el año pasado (una encuesta en la que, revelación completa, yo estaba entre los críticos de votación), Phil Coldiron del sitio lo describió como "uno de los mejores películas antiimperialistas, "una parodia de Hollywood cuya superficial" maldad "es central en su crítica. Le fue bien en The A.V. La encuesta de los 90 de Club también aparece entre los primeros 50, donde fue elogiada como una "sátira de gonzo destinada, incluso diseñada, para ser mal interpretada". Scott Tobias, ex editor de A.V. La sección cinematográfica de Club, elogió a Troopers algunos años antes como "la película de estudio más subversiva de la historia reciente", y observó que "ahora parece absurdo descartarla como una tontería de escapismo, como se quejaron sus detractores".

Pero las percepciones erróneas originales aún persisten. El 4 de octubre, RiffTrax -una serie de comedias de comentarios descargables de los creadores de Mystery Science Theater 3000- lanzó un episodio en el que se burlaron de Starship Troopers, una película que su sitio web describe como "tonta y ruidosa" y un "desastre tonto". Mike J. Nelson y sus coprotagonistas de RiffTrax, Kevin Murphy y Bill Corbett, aborrecen la película con tanta perspicacia e ingenio como malinterpretan la película. Humor de muestra: en un momento, una bomba destruye un error gigante, y los tres gritan: "¡Oh, no! ¡Raid!" Más tarde, Denise Richards sonríe y alguien dice, con voz robótica, "Smile-o-tron 3000 comprometida" . "Sigue así. El eslogan de RiffTrax es "Tus películas favoritas, ¡divertidas!". Lo que parece que no entienden es que Starship Troopers ya es divertido e inteligente.

Troopers, por supuesto, está lejos de ser la única instancia de una película que se malinterpreta popularmente. Dada la distancia suficiente, incluso la película más fervientemente vilipendiada puede algún día encontrar resucitado su legado, ganando décadas después su aclamación largamente esperada. Tal vez ese tiempo está cerca para Troopers; con suerte, al menos algunos oyentes de Rifftrax recientemente presentados a la película entendieron lo que realmente estaba pasando. Si estás abierto y en sintonía con él, si estás preparado para el rigor y la intensidad del enfoque de Verhoeven, obtendrás el chiste que Starship Troopers está diciendo. Y te reirás.

viernes, 27 de julio de 2018

The Stick (Sudáfrica)


Para los censores de tiempo de guerra de Sudáfrica, 'The Stick' era demasiado peligroso para lanzarlo

La película de terror de 1988 fue oscuramente cínica


Matthew Gault | War is Boring


Entre 1966 y 1990, Sudáfrica libró una guerra brutal y sangrienta a lo largo de su frontera norte. En 1988, el escritor y director sudafricano Darrell Roodt lanzó su película The Stick. El gobierno lo prohibió rápidamente.

The Stick es una película de terror sobre soldados sudafricanos que luchan contra una guerra sin sentido lejos de casa. Los censores temieron que la publicación de la película sería "altamente perjudicial para la seguridad del estado, así como para la paz y el buen orden de los países involucrados".

Los censores tenían razón en preocuparse. El Stick se abre a los soldados sudafricanos que deambulan por el monte, cazando "terroristas". De la nada, insurgentes comunistas armados con ametralladoras emboscan a los soldados, matando a todos los que ven antes de desaparecer entre los árboles.

Corte a un animador de Madonna que baila y canta para las tropas que están a punto de ir al frente. Los soldados no están prestando atención. Están haciendo drogas y teniendo sexo.

"Las cosas se pusieron tan mal, ellos -los generales y los políticos- ya ni siquiera sabían cómo controlarnos", narra Cooper, el protagonista de la película. "No fue suficiente pronunciar discursos sobre el patriotismo, repartir medallas o hablar sobre la invasión del comunismo. Estábamos demasiado ocupados tratando de mantenernos vivos para preocuparnos de que nuestras madres y hermanas fueran violadas por cubanos nostálgicos ".

Por la mañana, los altos mandos le dicen a Cooper y a sus compañeros soldados que los terroristas al norte de la frontera siguen matando a las tropas sudafricanas. Su solución es dividir varios pelotones en pequeños grupos de ocho soldados cada uno, llamados "palos", y enviarlos a cazar al enemigo.

Cooper y algunos otros soldados, incluido un teniente ineficaz y un adicto a las drogas racista payasescamente llamado O'Grady-se encamina hacia su perdición-




Lo que sigue es una trama de terror clásica. O'Grady establece el tono al disparar a un niño desarmado en la espalda tan pronto como el palo cruza el borde. Más tarde, los soldados encuentran un pueblo de mujeres, niños y un médico brujo. El teniente le dispara a uno de sus propios soldados por no poder traducir para el hechicero. Entonces Cooper le dispara al hechicero, O'Grady incendia la aldea y las cosas, bueno, cambian.

No es una película terriblemente original, pero está bien dirigida y actuada y, para una función de microbudget, se mantiene bien. Merece una mejor versión que las rasgaduras granuladas de VHS que puedes encontrar en línea.

Lo que más llama la atención de The Stick es su cinismo. En la década de 1980 en Sudáfrica, fue suficiente para sacar la película de la distribución. Al final, solo Cooper sobrevive. Él está embrujado. Sus comandantes solo quieren que Cooper cierre el infierno sobre lo que vio.

Proponen enviarlo a casa. Cooper mira al general que viene a darle de alta del hospital. El soldado mira directamente a la lente de la cámara. "Vas a perder esta jodida guerra", dice.

Los censores llamaron el lenguaje de la película durante su revisión y varias apelaciones, y esta línea en particular fue un punto de fricción. "Un número considerable de espectadores ... simplemente consideraría estas palabras como un intento ... de hacer que la gente pierda confianza en el esfuerzo bélico sudafricano o en un esfuerzo similar contra los terroristas", escribió la Junta de Apelación de Cine de Sudáfrica en ese momento.

La guerra fronteriza de Sudáfrica terminó en 1990, solo dos años después del lanzamiento final de The Stick, que fue fuertemente censurado. El director Roodt ganaría un Oscar a la mejor película en lengua extranjera el Ayer de 2004. El mismo año, lanzó el desastre televisivo Dracula 3000 protagonizado por Casper Van Dien y Coolio.

La primera es la historia de una joven madre zulú con SIDA que lucha por sobrevivir el tiempo suficiente para ver a su hija ir a la escuela. El otro es sobre Drácula en el espacio. El Stick cae en el medio.

domingo, 22 de abril de 2018

Conquista de América: La Misión (1986)


The Mission



En 1750, en la selva tropical del centro de América del Sur, los nativos guaraníes atan a un sacerdote jesuita a un árbol, empujan este crucifijo en los rápidos del río y lo observan sumergirse en las majestuosas cascadas de Iguazú. Pronto el Padre Gabriel (Jeremy Irons), otro jesuita, llega para continuar el trabajo del sacerdote mártir. Después de escalar los acantilados junto a las cataratas, saca un oboe y comienza a jugar. Los nativos guaraníes emergen de la densa jungla y lo rodean. A través de la música, sin embargo, lo reconocen como un hombre de paz y lo llevan entre ellos. Durante una incursión de indígenas guaraníes por encima de las cataratas, el mercenario de esclavos Rodrigo Mendoza (Robert De Niro) se encuentra con Gabriel y se entera de que los jesuitas están construyendo una misión allí. Meses más tarde, Mendoza y Gabriel se encuentran nuevamente. En un ataque de celos por haber perdido a su amante, Mendoza ha matado a su hermano y se ha sumido en una profunda depresión. Gabriel lo reta a tener el coraje de vivir y elegir una penitencia por su crimen. Cuando el sacerdote, Fielding (Liam Neeson) y otros jesuitas escalan los acantilados de las Cataratas del Iguazú, Mendoza está con ellos, arrastrando detrás de él un saco lleno de su armadura y su espada. En la misión, el pueblo guaraní, a quien una vez había perseguido, lo recibió en su comunidad. Finalmente, Mendoza toma los votos para convertirse en un miembro de la orden jesuita.



sábado, 14 de abril de 2018

PGM: The Long Road to War

El largo camino hacia la guerra: Largometraje documental sobre los orígenes de la Primera Guerra Mundial (con Extended Trailer)

War History Online


Fotografía del Archiduque y su esposa saliendo del Ayuntamiento de Sarajevo después de leer un discurso el 28 de junio de 1914. Fueron asesinados cinco minutos después.

Long Road to War es un documental de largometraje sobre los orígenes de la Primera Guerra Mundial. Procedente de un país que perdió más del 20% de su población en la Gran Guerra, el director serbio Miloš Škundrić dice que se sorprendió al saber lo poco que él y su generación conocían sobre el motivo de esta "catástrofe seminal del siglo XX".

El director dijo:

"A pesar de que había muchos libros sobre lo que los historiadores tratan de uno de los tópicos más importantes de todos, me sorprendió que los orígenes de la guerra hayan estado sujetos a casi ninguna película en absoluto en los últimos 100 años. De acuerdo, el tema se incorporó en su mayoría a los documentales que cubren la guerra misma y brevemente, o se limitaron solo a 1914.

Pero no se puede entender por qué la muerte de un heredero por parte de su súbdito debería desencadenar una guerra mundial, si no se retrocede más hacia el pasado, ¿o sí? Estas fueron las razones de esta película, y me había marcado metas altas, tanto en términos de calidad de producción como de autenticidad histórica.

La historia de la película comienza a finales del siglo XIX. A pesar de que las guerras durante la década de 1870 terminaron, la paz en Europa era frágil. El estado mayor alemán estaba llamando a una nueva guerra desde 1875, y por lo tanto casi estalló en 1905 y 1911 sobre Marruecos, y en 1908 y 1912/13 sobre los Balcanes. Siempre hay algo que lo disuadió, pero desde 1912 la guerra está en su punto final ".


Wilhelm II y Winston Churchill durante una maniobra militar de otoño cerca de Breslau, Silesia (Wrocław, Polonia) en 1906

A mediados de la década de 1960, el entonces joven historiador, John C.G. Röhl, descubrió documentos sobre lo que se conoce como el "Consejo de guerra alemán" del 8 de diciembre de 1912. Fritz Fischer publicó esos registros en su libro War of Illusions y puso patas arriba la historiografía alemana. Ayudaron a comprender el pensamiento estratégico del Ejército y la Marina de Alemania, que planificaron la guerra "en las circunstancias más convenientes". En esa reunión, acordaron que la guerra que estaba acechando en 1912, debería posponerse hasta el verano de 1914, cuando ambos su ejército y la marina estarían listos.

El director tomó la información como punto de partida para su película y contactó al profesor emérito Röhl de la Universidad de Sussex. Ha escrito una biografía muy detallada en tres partes sobre Kaiser Wilhelm II, que asciende a casi 15,000 páginas, reconstruyendo su vida casi día a día.

"Y la biografía del Kaiser nos cuenta toneladas sobre la historia de Alemania y, por lo tanto, de la Europa de la época", dijo el director.


Junto con el profesor Röhl, hay otros historiadores destacados de esa época. Es importante destacar que provienen de países que son cruciales para comprender el estallido de la Gran Guerra: Austria, Alemania, Francia, Rusia, Serbia y Gran Bretaña. Se reunieron por primera vez para asesorar sobre la película. Sir Hew Strachan, Dominic Lieven, Lothar Höbelt, Oleg Airapetov, Georges-Henri Soutou, Jean-Paul Bled, Annika Mombauer, Stig Förster, Alan Sked, Dušan Bataković.


Hindenburg, Wilhelm II y Ludendorff en enero de 1917

El documental utiliza películas y fotografías de unas quince casas de archivo de todo el mundo, por lo que es "más acción, menos cabezas parlantes en la pantalla". La idea del director era hacer un documental que se pareciera a una película de Oliver Stone. Un thriller histórico y político, y una emocionante pieza de cine en lugar de televisión, dijo:

"La película como medio existe solo desde finales del siglo XIX. Algunas figuras históricas, aunque muy importantes, son imposibles de encontrar en la película. ¡Y son personajes cruciales en este drama! Entonces fue una pieza muy difícil de hacer, y tuve ganas de dejar de fumar muchas veces. Pero, lo vimos a través de. La historia se usa constantemente para fines políticos cotidianos, y odio eso. Entonces, traté de verificar cada información que escribí para el narrador o que los historiadores dicen en pantalla. Investigamos una vez más los archivos, y es interesante que tanto el profesor Röhl como yo encontremos nuevos documentos en archivos alemanes durante la producción de esta película. Y, al mismo tiempo, Annika Mombauer también publicó una nueva colección de los documentos más importantes de su libro "Los orígenes de la Primera Guerra Mundial: documentos diplomáticos y militares" que realmente ayudaron mucho ".


Esta imagen generalmente se asocia con el arresto de Gavrilo Princip, aunque algunos creen que representa a Ferdinand Behr, un espectador

La película está principalmente en inglés, con algo de alemán, francés y ruso hablado por los historiadores.

Esta pieza de casi dos horas se estrenará en Serbia como una función especial en el 65º Festival de Cine Documental de Belgrado el viernes 30 de marzo de 2018.


domingo, 4 de marzo de 2018

El cruce 1 (China)

El cruce 1


Esta es la escena de batalla inicial de la película "The Crossing Part 1", dirigida por el director de cine de Hong Kong nacido en China, John Woo.



Trailer y tema principal


miércoles, 21 de febrero de 2018

22 minutos (22 минуты) - Rusia

"22 minutos" (22 минуты ), Vasiliy Serikov, 2014.


La producción está basada en el caso del secuestro del navío MV Universidad de Moscú durante los días 5 y 6 de mayo de 2010, cuya tripulación tuvo que atrincherarse en la bodega de carga tras ser asaltados por piratas somalíes en aguas del golfo de Adén.
El Yamal, un barco cisterna gasístico sufre el asalto de un comando de piratas somalíes mientras navegaba por aguas del golfo de Adén. Viendo el cariz que toma la situación, el Comandante da la voz de alarma y ordena a sus tripulantes que se refugien en la sala de máquinas a excepción de un miembro que quedó rezagado.

Los terroristas aprovechan que tienen un rehén a mano para exigir a los demás que se entreguen o explosionarán el barco. Tras recibir la alarma, un equipo de la Armada prepara una operación de rescate descartando las armas de fuego debido a la carga que transporta el barco afectado.



Película completa en ruso

sábado, 10 de febrero de 2018

Guerra ruso-japonesa: Kochi 203 (Colina 203)



Kochi 203


La historia narra la batalla por la colina 203 durante la guerra ruso-japonesa en 1905. La colina fue capturado con la pérdida de muchas vidas en ambos lados, japoneses y rusos. La captura de la colina permitió al ejército japonés poner presión sobre la flota rusa del Pacífico, asegurando así la victoria japonesa, al mando del Almirante Togo , en la batalla naval siguiente.




Escenas de asalto de trincheras



Trailer 

jueves, 1 de febrero de 2018

Surface to Air (1998)

Surface to Air


Dos infantes de marina, que son hermanos, viajan al Golfo Pérsico para resolver una situación terrorista iraquí. Cuando un hermano es derribado detrás de las líneas enemigas, el otro desafía órdenes para rescatarlo. Pero un escuadrón de la muerte de soldados iraquíes lo sigue de cerca detrás de él ...



domingo, 28 de enero de 2018

SGM: Indigénes (Francia)


Indígenes (2006)


La participación de argelinos en la liberación de Francia. Film de guerra dirigido por Rachid Bouchareb (2006) con una duración de 119 m. Una coproducción franco-argelino-marroquí.


domingo, 21 de enero de 2018

GCE: La batalla de Catalunya

Grandes batallas de la Guerra Civil Española: La batalla de Cataluña


Es el año 1936... Europa vive un momento de gran conflictividad social y en plena convulsión política. España se convertiría entonces en el crisol de todos esos conflictos, dando paso a una guerra civil que marcó el final de una época y el comienzo de una nueva forma de hacer la guerra. Antesala de la IIª Guerra Mundial, la Guerra Civil Española sirvió a las grandes potencias como campo de pruebas de nuevos armamentos, estrategias y tácticas militares, que se emplearían después en la contienda mundial. Fue considerada la primera guerra moderna.  La población civil padeció, por primera vez, la guerra en la retaguardia, con el bombardeo masivo de ciudades y pueblos.  Nombres como Jarama, Belchite o La Batalla del Ebro permanecen aún hoy en la memoria colectiva dentro y fuera de España.


martes, 16 de enero de 2018

Escena: Combate aéreo del 14 de Agosto de 1937

『八一四空戰』 2015版


Bautismo de fuego de la Fuerza Aérea de la República de China (Taiwán)


El Cuarto Grupo de Persecución de la ROCAF (Republic of China Air Force) dirigido por el Cnel. Kao Chih-hang (1907-1937), equipado con cazas biplanos Curtiss "Hawk III" construidos en Estados Unidos, interceptó dos grupos de nueve bombarderos bimotores Mitsubishi G3M2 "Tipo 96" (más tarde código-nombre aliado "Nell") del "Kanoya Kokutai" (Escuadrón Kanoya) de la Armada Imperial japonesa liderada por el Comandante Shinichi Nitta puesta en escena de la entonces colonia japonesa de Taiwán, con la intención de noquear a la base de la ROCAF en Schien-schaio en la etapa inicial de la Batalla de Shanghai . Esperando poca oposición china, los bombarderos japoneses sin escolta se toparon con la feroz resistencia de los anticuados pero bien posicionados cazas de la ROCAF, perdiéndose tres bombarderos y un cuarto destruido tras el aterrizaje forzoso en el aeródromo de Matsuyama, Taihoku (ahora Aeropuerto Sungshan de Taipei); Las pérdidas chinas fueron un piloto herido de muerte y otro levemente herido en aterrizajes accidentales después de quedarse sin combustible.